Pseudiciencia e inspiración en los clásicos

Para el siglo XVIII la astrología ya había perdido su rigor científico y académico producto de los avances en el pensamiento crítico científico, lógico y racional del siglo de las luces, desplazando al terreno de lo místico y lo absurdo donde sobrevivió con bajo perfil entre unos pocos entusiastas. Sería hasta finales del siglo XIX cuando la astrología reapareció gracias movimientos como el romanticismo oponentes al pensamiento racional y científico del pensamiento ilustrado.

Un mapa de las constelaciones visibles desde el hemisferio norte, en él prima mostrar la posición de los astros sobre la estética de las figuras.

Zodiac del artista inglés Ernest Procter, es una pintura de óleo sobre tela donde se representan a los doce signos del zodiaco de acuerdo a los nombre y posición de las constelaciones habituales de las astrología.

Ya bien entrados en el siglo XX la astrología habría recuperado popularidad más como una ficción inofensiva y de entretenimiento de la mano de revistas y programas de tv y radio, sin embargo,no dejaría de ser considerada una pseudociencia.
Muchos artistas vanguardistas y modernos produjeron obras apropiándose de las representaciones clásicas astrológicas resignificando las a sus propios contexto y otros encontraron inspiración en las obras clásicas de la mitología que contaban los orígenes de ciertas constelaciones y algunos otros inspirados por la distribución de las estrellas en el firmamento bautizaron a sus obras como constelaciones.

En esta obra del artista Man Ray, muestra a dos figuras de similar longitud que parecen encajar la una en la otra, una mujer desnuda y un pez en paralelo que hacen referencia a la constelación y representación clásica de Piscis, la cual suelen ser dos peces en paralelo.

Se trata de un óleo sobre tabla del Artista Frank Auerbach, esta pintura está inspirada en otra de Durero Titian 's Bacchus and Ariadne (1522-3), estas representan la historia mitológica de la creación de la constelación de la corona boreal.
Según la de versión este mito cuenta que Baco dios del vino para demostrar su divinidad a Ariadna le toma su corno y la lanza al cielo formando la constelación.

En la pintura los trazos rojos se pueden identificar como Baco y Ariadna, los trazos negros son el sequito de Baco y en la parte superior, en el cielo un halo de colores verde amarillo y naranja que son la contelación en la que fue convertida la corona de Ariadna.

Frank Auerbach, Bacchus and Ariadne, 1971, Óleo sobre tabla, Tate Modern, Londre, Inglaterrra, https://www.tate.org.uk/art/artworks/auerbach-bacchus-and-ariadne-t06687

Ernest Procter (1886–1935), The Zodiac, 1925, oleo sobre tela, 1524 × 1676 mm, Tate Modern, Londre, Inglaterra,https://www.tate.org.uk/art/artworks/procter-the-zodiac-n04839

Man Ray (1890–1976), Pisces, 1938, Oleo sobre tela, 600 × 730 mm, Tate Modern, Lodres Inglaterra, https://www.tate.org.uk/art/artworks/man-ray-pisces-t00324